viernes, 22 de agosto de 2014

El humor de un exquisito poeta... Flaubert

Diamante. ¡Se terminará por producirlos artificialmente! ¡Y pensar que no es más que carbón! ¡Si lo encontráramos en su estado natural ni siquiera lo recogeríamos!
Pan. No se tiene idea de todas las porquerías que hay en el pan.
Jorobados. Tienen mucho talento. Las mujeres lascivas los buscan mucho.
Huevo. Punto de partida para una disertación filosófica sobre el origen de los seres humanos.
Lince. Animal célebre por sus ojos.
Navegante. Siempre intrépido.
Estornudo. Después de decir ¡”Salud”!, trabase en discusión sobre el origen de esta costumbre.
Infanticidio. Sólo lo comenten las clases populares.
Omega. Segunda letra del alfabeto griego, ya que siempre se dice: alfa y omega.
Erección. Sólo se menciona al hablar de monumentos.
Rubias. Más ardientes que las morenas (ver morenas).
Morenas. Más ardientes que las rubias (ver rubias).

martes, 19 de agosto de 2014

Greguerías

El amor nace del deseo repentino de hacer eterno lo pasajero.
Los que matan a una mujer y después se suicidan debían variar el sistema: suicidarse antes y matarla después.
Los globos de los niños van por la calle muertos de miedo.
El bebé se saluda a sí mismo dando la mano a su pie.
¿Y si las hormigas fuesen ya los marcianos establecidos en la Tierra?
La gallina está cansada de denunciar en la comisaría que le roban los huevos.
Lo peor del loro es que quiera hablar por teléfono.
Eso de creer que el loro no sabe lo que dice es no querer ofender, pero el loro nos mira cuando nos insulta.
Respetamos ese insecto que se pasea por el frutero porque es el que ha becado el campo para que vea la ciudad.
El sueño es un depósito de objetos extraviados.
El que está en Venecia es el engañado que cree estar en Venecia. El que sueña con Venecia es el que está en Venecia.

miércoles, 6 de agosto de 2014

Exquisito poema Azteca.

¿A dónde iremos 
donde la muerte no exista? 
Más, ¿por ésto viviré llorando? 
Que tu corazón se enderece: 
aquí nadie vivirá para siempre. 

Aún los príncipes a morir vinieron, 
los bultos funerarios se queman. 
Que tu corazón se enderece: 
aquí nadie vivirá para siempre.

De hace mucho tiempo...

Oración primera al hacedor
Causa del ser, Viracocha,
Dios siempre presente,
Juez que en todo está,
Dios que gobierna y provee,
Que crea con sólo decir:
‘’ Sea hombre, sea mujer’’,
Que viva libre y en paz
El ser que pusiste
Y criaste.
¿Dónde estás? ¿Afuera,
O adentro, en la nube
O en la sombra?
Oyeme, contéstame
Haz que viva muchos días,
Hasta la edad en que deba
Encanecer.
Entonces, levántame
Tómame en tus brazos
Y si me canso, auxíliame
Doquiera estés, Padre Viracocha